lunes, mayo 04, 2009

Novalis y su Alquimia Literaria (Sergio Fritz Roa )




Los escritores que llamamos románticos estuvieron influidos de manera notable por la filosofía hermética. L´Isle Adam, Hölderlin, Goethe, Blake, Nodier, Nerval, Balzac, así lo evidencian. Y, por supuesto, Novalis, quien será uno de los mayores difusores de este llamado a sacralizar la vida y a liberarla de las ataduras convencionales. En las obras de todos estos literatos aparece, con mayor o menor grado, el simbolismo alquímico y la búsqueda de un conocimiento sagrado velado para la mayoría.

Y es el profundo y melancólico Friedrich Leopold von Handerberg, más conocido como Novalis, quien ofrece uno de los mejores ejemplos del habitar alquímico en la literatura. Como primera cuestión, su propia cosmovisión es la propugnada por el hermetismo: el conocimiento de la naturaleza, pues es en ella donde mora el espíritu. Sus obras son viva expresión del deseo de trascender la materia a través de un proceso que comprende las tres clásicas etapas alquímicas: nigredo, albedo y rubedo (o proceso de negrura, purificación y concreción del Adam Kadmon u hombre primordial, respectivamente). Dentro del primer momento de la búsqueda está la nigredo, negrura o muerte mística, es decir La Noche. No por nada, Novalis tituló “Himnos a la Noche”, su obra más famosa. Los alquimistas reiteran en sus tratados la importancia de la muerte o putrefacción como primera edad en la elaboración de la Piedra Filosofal. Luego que la materia es golpeada y pulverizada, la esencia se va purificando y empieza a mostrarse. Es la albedo o reino del blanco. Finalmente, se nos presenta la rubedo o época del vigor o concreción de los tres principios (mercurio, azufre y sal). Solo después vendrá la Edad Dorada, el reestablecimiento de la luz.


Las alusiones de Novalis a la flor, a la luz, a las polaridades (luz-sombra, noche-día, hombre-mujer) y su resolución, como al viaje iniciático, encuentran desde una perspectiva alquímica un rico material de interpretación. Especialmente su inacabado “Enrique de Ofterdingen” entrega joyas para quienes deseen confeccionar una profunda hermenéutica. Las alusiones en dicha obra a la astrología, la mineralogía y el proceso alquímico son muchas. Aunque no nos es posible aquí realizar un exhaustivo estudio al respecto, deseamos, ¡eso sí!, remitir al lector al bello canto de Klingsohr, que empieza con “En verdes montañas nace…”. Allí se describe de manera metafórica, pero distinguible para quienes están acostumbrados a la lectura de los clásicos de la alquimia, la materia prima, el matraz y los procesos que nos conducirán a obtener la ansiada Lapis Philosophorum (Piedra Filosofal).


Sin duda, el de Novalis es un homenaje inmenso a la ciencia hermética, a través de una literatura intensa y elevada.


Publicado originalmente en revista Yareah, Nº7, 2009:

http://www.yareah.com/magazine/index.php/literature-literatura/281-novalis-y-su-alquimia-literaria


No hay comentarios.: